Víctima de un SLAPP por el poder inmobiliario en Barcelona no se le permite hacer conocer quiénes son los grandes propietarios de la ciudad y qué inmuebles controlan.
El digital “critic.cat” ha sido galardonado con uno de los premios Montserrat Roig de comunicación en la categoría de promoción de la investigación periodística en el ámbito del bienestar social en Barcelona. En esta web no tenemos por costumbre publicar la concesión de galardones a medios; hoy lo hacemos porque se da una circunstancia singular que muestra el brazo largo de la represión a los medios independientes.
Este medio ha sido galardonado por un proyecto de investigación titulado “De quiénes son los pisos en Barcelona”, que durante el próximo año pretende destapar el poder inmobiliario de la capital catalana. “El objetivo será la publicación de un buscador público y gratuito para que todo el mundo pueda saber quiénes son los grandes propietarios de la ciudad y qué inmuebles controlan”.
La singularidad del caso es que la iniciativa de “critic.cat” debe completarse con la publicación de un reportaje “sobre los cinco principales grandes tenedores de vivienda que operan en la ciudad de Barcelona y una formación sobre derecho de acceso a la información pública abierta a toda la ciudadanía”, pero ese reportaje en estos momentos no se puede completar porque el peso de una SLAPP ha caido sobre el medio.
Este medio señala que mediante una petición de transparencia al Incasol, ha descubierto que “10 empresas concentran 25.000 pisos de alquiler. Pero no hemos podido publicar todavía la información porque la Cámara de la Propiedad interpuso un contencioso-administrativo ante el TSJC para evitarlo.
La Cámara se opone a que la Generalitat nos facilite los nombres de estas empresas, aunque la Comisión de Garantía por el Derecho de Acceso a la Información Pública (GAIP) y la Agencia de Protección de Datos avalan nuestra petición”. El medio ha debido impulsar una campaña de crowdfunding para plantar batalla en los tribunales al veto de la Cámara. En este momento el procedimiento judicial sigue en marcha y el TSJC ha emitido una diligencia iniciando la fase de conclusiones.