La FeSP y el SPM participaron en una concentración, en la que se exigió al Gobierno que actúe para que se respeten sus derechos.
Cerca de 200 personas se concentraron ayer tarde frente al Ministerio de Asuntos Exteriores, en Madrid, para reclamar la libertad provisional del periodista hispanorruso Pablo González, encarcelado en Polonia en condiciones infrahumanas desde el día 28 de febrero de 2022 sin que aún hayan presentado acusaciones concretas contra él. También hubo concentraciones en Barcelona y Gernika (Vizcaya).
A la concentración en Madrid asistieron, además del grupo de apoyo #FreePabloGonzález que convoca estos actos, el secretario general de la Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP), Agustín Yanel, y varias personas del Sindicato de Periodistas de Madrid (SPM); miembros del grupo Free Assange España en apoyo a Julian Assange; el cofundador de Podemos Juan Carlos Monedero y otras personas.
A primera hora de la mañana, en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, el diputado de EH Bildu Jon Iñarritu preguntó qué va a hacer el Gobierno para garantizar el derecho de Pablo González a un proceso sin dilaciones indebidas. El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, le respondió así: «Voy a seguir exigiendo un juicio oral lo antes posible y voy a seguir ocupándome directamente y dando instrucciones, como he hecho desde hace dos años, al embajador de España en Polonia para que él personalmente se ocupe».
Horas después, tras esas afirmaciones, las personas concentradas en Madrid corearon críticas al ministro Albares, porque consideran que ese periodista hasta ahora no ha sido atendido por el Gobierno español como corresponde, y le exigieron que intervenga ante Polonia para que sea puesto en libertad provisional hasta que se celebre el juicio.
La concentración concluyó con la lectura de un manifiesto en el que, entre otras cosas, se afirma: «La diplomacia española puede y debe intervenir en ayuda de sus ciudadanos en el extranjero. No pedimos ni más ni menos que eso. Exigimos que se respete la presunción de inocencia de Pablo González, y que su Ministerio presione para que sea juzgado inmediatamente, con todas las garantías legales, o bien trasladado a España a la espera de juicio. Exigimos que se respeten sus derechos humanos en prisión y exigimos que el Ministerio de Asuntos Exteriores, mediante la diplomacia, actúe en defensa de un ciudadano español, como lo hace en otras ocasiones. ¡Hacer periodismo no es delito!».
El grupo de apoyo a Pablo González también registró ayer en el Ministerio de Asuntos Exteriores una carta dirigida al ministro Albares, en la que critican que haya dicho en varias ocasiones que los derechos de ese periodista están siendo respetados por Polonia, cuando lleva dos años en prisión en condiciones infrahumanas, 23 horas al día en una celda sin luz natural y con solo una hora de patio, sin haber podido hablar por teléfono con sus tres hijos y con solo dos visitas de su esposa. Es la novena carta que dirigen al ministro y ninguna ha recibido respuesta.
Además de esas acciones, los diputados de Podemos registraron ayer una proposición no de ley en la que solicitan que el Congreso inste al Gobierno a «emplear todas las herramientas a disposición del Gobierno de España para garantizar el cese inmediato de la prisión provisional del periodista y la realización de un procedimiento judicial con todas las garantías».
En esa proposición no de ley recuerdan que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha advertido en repetidas ocasiones que el uso de la prisión preventiva es un problema estructural en Polonia y que este país «incumple de manera sistemática las recomendaciones de la Unión Europea sobre los derechos procesales de las personas sospechosas o acusadas sometidas a prisión provisional».
