La defensa ha recurrido: «La insólita sentencia afecta a la línea de flotación del ejercicio de la libertad de información, sentando un peligroso precedente»
Varios grupos de periodistas se han concentrado hoy ante distintas audiencias provinciales, en apoyo a la periodista de Huelva que fue condenada en junio por la Audiencia Provincial a dos años de cárcel e inhabilitación para ejercer el periodismo, acusada de un delito de revelación de secretos por haber informado en el diario Huelva Información del sumario sobre el asesinato de una profesora en diciembre de 2018 en un pueblo onubense.
En Huelva, cuya Asociación de la Prensa ha convocado las concentraciones, ha asistido la periodista condenada, que prefiere mantenerse en el anonimato. Un grupo de periodistas, con la boca tapada con esparadrapo simbolizando la censura judicial que supone esta sentencia, se situó tras una pancarta con el lema Sin periodistas no hay periodismo, sin periodismo no hay democracia.
A la concentración en Madrid, que tuvo lugar ante el Tribunal Superior de Justicia, asistieron el secretario general de la Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP), Agustín Yanel, y el presidente de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), Miguel Ágel Noceda. La presencia de periodistas fue muy escasa porque en la Audiencia Nacional, situada cerca del TSJM, estaba citado para declarar a esa misma hora el expresidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, y decenas de periodistas estaban cubriendo esa información.
También hubo concentraciones similares al menos ante las audiencias provinciales de Sevilla, Málaga y Tenerife, convocadas hoy coincidiendo con la conmemoración del Día Internacional de la Democracia.
Esta sentencia ha provocado una gran preocupación en el sector periodístico porque es la primera vez que se condena a una pena de cárcel a un periodista por ejercer su trabajo de informar. Distintos juristas han manifestado siempre que el delito de revelación de secretos no lo comete nunca el periodista que tiene acceso a un sumario por sus fuentes legales e informa de él cuando es de interés general, como ocurrió en este asunto, sino en todo caso la persona encargada de custodiar esa documentación si se demuestra que la ha divulgado.
También ha sorprendido, y ha sido muy criticado, que los jueces que dictaron la condena se arroguen el papel de periodistas, ya que en la sentencia llegan a afirmar que algunos datos del sumario que publicó la periodista no eran noticiables.
La periodista condenada ha recurrido en apelación ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) y ha pedido la revocación de la sentencia condenatoria. Su defensa argumenta que se ha vulnerado el derecho a la libertad de información que garantiza la Constitución, el derecho a la presunción de inocencia y el derecho a la defensa, además de apreciar en la sentencia un error en la calificación de los hechos declarados probados.
«La insólita sentencia afecta a la línea de flotación del ejercicio de la libertad de información por los periodistas, sentando un peligroso precedente que criminaliza una práctica frecuente como es el empleo de información procedente del sumario por fuentes de caso en cuestión», argumenta en el recurso.
La FeSP expresó desde el primer momento su apoyo a la periodista y el rechazo a la sentencia, y pidió al TSJA que la revoque. Esta organización ha apoyado las concentraciones de protesta porque considera que la sentencia supone una censura judicial a la libertad de información.
Más información: La primera periodista condenada a cárcel por publicar un sumario judicial recurre la sentencia | Sociedad | EL PAÍS (elpais.com)
