Una iniciativa parlamentaria exige que las empresas de plataformas revelen cómo utilizan algoritmos para pagar, asignar trabajo y suspender a sus trabajadores.
Human Rights Watch, una ONG estadounidense dedicada a la investigación, defensa y promoción de los derechos humanos informa de una iniciativa parlamentaria para asegurar los derechos de los trabajadores.
Cada día, millones de trabajadores en Estados Unidos acceden a aplicaciones como Uber, DoorDash y Amazon Flex para ganarse la vida, sin saber cuánto cobrarán, cómo se asignan las tareas ni si podrían ser expulsados de una plataforma y por qué, señala.
Este 24 de julio, los senadores Brian Schatz y Chris Murphy presentaron la “Ley de Empoderamiento de los Trabajadores Basados en Aplicaciones”, una propuesta para la transparencia y la equidad necesarias en el trabajo temporal. De aprobarse, se exigiría a las empresas de plataformas que revelaran cómo utilizan algoritmos para gestionar, pagar, asignar trabajo y suspender a los trabajadores.
Limitaría la fijación algorítmica de salarios y establecería límites claros sobre los datos que las empresas pueden recopilar, incluyendo información sobre estatus migratorio, salud, discapacidad y orientación sexual. También garantizaría a los conductores de viajes compartidos al menos el 75% de cada viaje y prohibiría a las empresas pagar salarios diferentes a los trabajadores por el mismo trabajo.
Human Rights Watch ha descubierto que los trabajadores de plataformas que encuestamos en Texas ganan tan solo 5,12 dólares por hora después de gastos, aproximadamente un 70 % por debajo de un salario digno. Algunos no ganan nada. Carecen de seguro médico, vacaciones pagadas o protección por desempleo. Muchos son despedidos sin previo aviso, explicación ni recurso.
Alrededor del 16 % de los estadounidenses han trabajado para una aplicación, desproporcionadamente personas de color. Dado que muchas empresas clasifican erróneamente a los trabajadores de plataformas como contratistas independientes, estos trabajadores quedan excluidos de muchas de las protecciones laborales garantizadas tanto por la legislación estadounidense como por el derecho internacional de los derechos humanos.
Este proyecto de ley facilitaría el acceso de los trabajadores a sus derechos. Exigiría a las empresas emitir recibos de sueldo semanales y recibos por trabajo que muestren el tiempo trabajado, el salario por hora y la cantidad que se queda la empresa de cada tarifa. Exige la presentación de informes públicos al Departamento de Trabajo, lo que ayudará a los reguladores y al público a exigir responsabilidades a las empresas.
Un aspecto fundamental del proyecto de ley es que establece un mínimo federal, no un máximo, lo que significa que los estados y las ciudades pueden aprobar protecciones más fuertes.