En ella se reconocerá que «la labor de una prensa libre, independiente e imparcial constituye uno de los fundamentos esenciales de una sociedad democrática«.
La Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP), la Federación de Asociaciones de Periodistas (FAPE) y las Agrupaciones de Periodistas de CCOO y UGT han solicitado al Gobierno que apoye la campaña que ha puesto en marcha la Federación Internacional de Periodistas (IFJ/FIP) para constituir una Convención de la ONU sobre la seguridad y la independencia de los periodistas y otros profesionales de los medios de comunicación.
La Federación Internacional de Periodistas, de la que forman parte las cuatro organizaciones citadas, ha pedido el apoyo de gobiernos de todo el mundo a las acciones que va a llevar a cabo para garantizar que este tema estará en la agenda tanto de la Asamblea General de la ONU como del Consejo de Derechos Humanos. En Naciones Unidas existen convenciones como la de los Derechos del Niño, la de los Derechos de las Personas con Discapacidad o contra la Tortura.
Las cuatro organizaciones han pedido ese apoyo en sendas cartas enviadas hoy al ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, y a la secretaria de Estado de Comunicación, Lydia del Canto.
«Dada la importancia de este asunto, le solicitamos una reunión para concretar mejor los motivos por los que la FIP y las organizaciones que la integran consideramos necesaria la citada Convención, y las razones que nos llevan a pedir el apoyo de Gobierno a las acciones que lleve a cabo la Federación Internacional de Periodistas para alcanzar este objetivo», indican en las cartas.
El borrador de la Convención incluye muchas medidas que los Estados que en su día la apoyen se comprometen a realizar. Entre otras, a adoptar las medidas necesarias para proteger la libertad de opinión y expresión de todas las personas; reconocen «las contribuciones esenciales realizadas por los periodistas y otros profesionales de los medios a la circulación de la información»; reconocen «que la labor de una prensa libre, independiente e imparcial constituye uno de los fundamentos esenciales de una sociedad democrática», y destacan la importancia de «garantizar para todos los profesionales de los medios el derecho a la vida, el derecho a la libertad personal y a la integridad física, el derecho a la protección a contra los malos tratos, el derecho a la libertad de expresión y el derecho a un recurso efectivo cuando se ha producido una vulneración de sus derechos».
También se reconocen «los riesgos específicos a que se enfrentan las mujeres periodistas y profesionales de los medios en la realización de su trabajo, especialmente cuando informan desde zonas de conflicto» y se recalca «la importancia de un enfoque sensible de género al considerar las medidas para garantizar la seguridad de los periodistas».
Tras esas y otras consideraciones, los Estados se comprometen a adoptar medidas para garantizar la seguridad de los periodistas y otros profesionales de los medios en tiempos de paz y durante un conflicto armado; que puedan ejercer su profesión de manera libre e independiente de acosos o intimidaciones; a incorporar a sus leyes medidas específicas para combatir la violencia por motivos de género contra mujeres periodistas; que las leyes sobre seguridad nacional o antiterroristas no obstaculicen el trabajo informativo, y a prestar especial atención a la seguridad de los periodistas y otros profesionales de los medios durante los periodos electorales y mientras cubren manifestaciones ciudadanas.
El documento propuesto por la FIP: https://www.ifj.org/fileadmin/user_upload/Draft_Convention_Journalists_-_S.pdf










